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La humilde seΓ±ora no paraba de llorar al ver a su hijo que pasarΓ‘ mΓ‘s de 30 aΓ±os en la cΓ‘rcel, pero poco a poco, esta madre se tranquiliza y comentΓ³ lo siguiente: Β«CΓ³mo me duele esto, a mi hijo lo perdieron las malas amistades, yo trabajaba todo el dΓa para mantenerlo y no podΓa estar con Γ©l, se me salΓa a la calle, aprendiΓ³ a fumar, a tomar y a hacer cosas malasΒ»..
Hizo uno pausa y siguiΓ³ diciendo: Β«Esto no se lo deseo a nadie, es cierto que estΓ‘n pagando sus errores pero los estΓ‘n tratando como animales, les pido mΓ‘s humanidad a las autoridades por amor de Dios, duele ver a un hijo asΓ, sea como sea es mi hijo yo lo tuve y siempre lo voy a amarΒ», y vuelve a llorar amargamente.
Β«Espero verlo libre antes de morirme, le pido a mi Dios que me conceda verlo libre, aunque sea en mi lecho de muerteΒ» dijo la madre entre lΓ‘grimas afuera del centro penitenciario salvadoreΓ±o dΓ³nde fue trasladado su hijo de 28 aΓ±os de edad, acusado de los homicidios de varios comerciantes.
