Declaran zona de emergencia en localidades afectadas por devastador tornado en Texas
El gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró este jueves una zona de emergencia en torno a Matador y otras localidades del norte del estado después de que tormentas y un tornado dejaron al menos cuatro personas muertas y una decena de heridos.
La medida, que ya regía en una veintena de condados afectados, ayuda a agilizar los recursos para la recuperación tras la devastación que han dejado varios tornados y el mal tiempo en la última semana.
El Cuerpo de Bomberos de Lubbock, una ciudad localizada a unos 95 kilómetros (60 millas) de Matador en el noroeste de Texas, dijo que se trató de “un tornado sin precedentes con vientos dañinos para la ciudad”.
Según el Servicio Meteorológico Nacional el de la noche del miércoles fue el tornado más mortífero en Texas desde uno que en 2015 causó devastación en el Condado Dallas. El fenómeno se formó al anochecer del miércoles cerca de la ciudad de Amarillo, al norte de Matador, con vientos de hasta 175 kilómetros por hora (109 mph).
El meteorólogo David Payne, de la estación KWTV de televisión en Oklahoma City, señaló que la magnitud de la destrucción indica que el tornado fue de categoría EF4 en una escala de un total de cinco.
Pat Smith, titular de la alcaldía de Matador, con una población de alrededor de 570 personas, dijo que los equipos de socorro seguían sacando residentes de los escombros y que habían retirado algunos cadáveres.
Además siete personas fueron llevadas a hospitales en ambulancias y otras tres en vehículos privados, indicó el Cuerpo de Bomberos.
Al menos 10 edificios resultaron destruidos por el tornado, añadió Smith.
La tormenta y los tornados, en una región que está afectada en los últimos días por altas temperaturas sin precedentes, causaron cortes del suministro de electricidad que dejaron a oscuras a cientos de residentes en Matador y Jayton.
La plataforma PowerOutage informó que en todo Texas hay unos 160.000 hogares y comercios sin energía eléctrica.
La semana pasada, la ciudad de Perryton, en el extremo norte de Texas, fue azotada por uno o más tornados, que causaron tres muertes iniciales, mientras las imágenes mostraban gran parte de la ciudad en escombros por el tornado.
Los lados norte y este de la pequeña ciudad sufrieron daños significativos, con casas rodantes destruidas y torres de comunicación derribadas, según ABC News, que citó al jefe de bomberos de Perryton, Paul Dutcher.
