Madre en Arizona es acusada de matar y arrojar el cuerpo de su hija a un basurero en Nochebuena

El nombre de Sophia Simmons, de 38 años, irrumpió las portadas de los medios en Phoenix, luego de su arresto por un cargo de asesinato después de que su pequeña hija fuera encontrada muerta en un contenedor de basura detrás de un negocio en Nochebuena.

De acuerdo a las investigaciones, la policía de Phoenix acudió al área de 31st Avenue y Thomas Road después de que alguien informó haber encontrado un cuerpo en un contenedor de basura.

Según documentos judiciales, los agentes llegaron y encontraron el cuerpo de una niña dentro de una bolsa de plástico. Un investigador de la Oficina del Médico Forense del Condado de Maricopa sacó el bolso del contenedor de basura y descubrió que la niña, que parecía tener entre 5 y 7 años, tenía múltiples lesiones en el cuerpo, incluidos brazos, piernas y torso. Según los informes, algunas heridas eran recientes, mientras que otras se encontraban en múltiples etapas de curación, incluidas cicatrices.

La policía también recibió un aviso de otro testigo, que vive en Nueva York, que afirmó haber recibido una llamada de la sospechosa, Sophia Simmons, de 38 años, el día de Navidad. El testigo declaró que Simmons le había confesado que había “golpeado a su hija y había ido demasiado lejos”. También relató que la sospechosa le dijo que dejó el cuerpo en el contenedor al ver que ya estaba muerta.

Según el informe policial, Simmons permaneció con el cuerpo de la víctima durante los siguientes cinco días antes de llevarlo a un contenedor de basura donde fue encontrado más tarde el 24 de diciembre.

A partir de ese momento, la policía vigiló la casa de Simmons y vio señales de que alguien había estado intentando limpiar la escena del crimen. Había muebles afuera y una manguera de jardín atravesaba la puerta principal.

Los detectives obtuvieron una orden de registro y encontraron agua estancada en toda la casa y notaron que faltaban cojines en el sofá. No había nadie en casa.

Los investigadores también revisaron el video de vigilancia de un vecino. Los oficiales también obtuvieron una orden judicial para el teléfono celular de Simmons y descubrieron que el dispositivo se movía hacia Arizona desde California.

Posteriormente, Simmons fue detenida y arrestada cerca de la I-10 en Tonopah. Los registros también mostraron que el teléfono de Simmons estaba en el área del contenedor de basura la mañana del 24 de diciembre.

La policía dice que Simmons se negó a hablar sin un abogado y fue acusada de varios delitos graves, incluido asesinato en primer grado, abuso infantil y manipulación de pruebas.

Simmons fue ingresada en la cárcel del condado de Maricopa y se le impuso una fianza de un millón de dólares.

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